Nueva Seccion

La Filial Rosario se enorgullece en dar inicio a una nueva seccion. Esta vez desde el lado mas "cultural" ya que se tratan de Poesias y Cuentos.
Estos escritos son realizados por Agustin Melsa, un joven de 21 años de la ciudad de Buenos Aires a quien agradecemos por su colaboracion para enriquecer nuestra pagina.
Asi como Agustin tambien quiero aprovechar estas lineas para agradecer a Mariano por sus historietas que nosotros tenemos el agrado de leer y divertirnos tambien por esta pagina (Las Magic Advenchurs) y agradecer a cada uno de uds por hacer de esta pagina y de esta filial un sueño cumplido ya que sin su colaboracion no seria posible que esta siga funcionando.
Sin mas para agregar, un fuerte abrazo de gol para todos.
Filial Racing Rosario
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4/3/99
Hace exactamente diez años, un 4 de marzo, salían de la boca de una mujer las palabras más escalofriantes que pudieran oír los miles de académicos diseminados por todo el país y el mundo: “Ha dejado de existir Racing Club Asociación Civil”.
La mujer en cuestión era la síndico Liliana Ripoll, alguien que seguramente no imaginaba la catarata de sensaciones que provocaría esa frase en todos y cada uno de los hinchas de Racing. Créase o no, por motivos meramente económicos y una deuda que se acrecentaba a límites inimaginables, querían cortarnos la pasión… querían sacarnos al amor de nuestras vidas.
La reacción fue inmediata, cada académico recibió esta incomprensible noticia y la asimiló como pudo aunque, era obvio, antes que asimilarla había que actuar…había que hacer algo de alguna forma. Por eso mismo se inició el reclamo cortando la Avenida Mitre, donde se encuentra la sede del club. Por eso mismo el redoblante a Lalín en un acto de completa impotencia. Por eso mismo aquel domingo, donde debíamos empezar el campeonato y no pudimos… pero la gente igual estuvo. Jugaron el partido más importante de su vida. Fueron alrededor de 30.000 almas las que inundaron todos los sectores del Cilindro, fueron a cantar y a gritar, fueron a demostrar el grado de amor y locura que sentían por eso que les querían arrebatar.
El abuelo de unos 70 años que hablaba maravillas de Corbatta y el hijo, de unos 40, que lo abrazaba agradeciéndole por haberle enseñado amar tanto a los colores. Con una banderita celeste y blanca estaba el nieto del anciano que quizás en ese momento no entendía bien que hacía allí… o que hacía toda esa gente en aquel lugar… o porque no salían los jugadores a la cancha… Más tarde comprendería que era lo que estaba haciendo allí… ESTABA HACIENDO HISTORIA!!!
La gente estuvo… y cada uno se fue a su casa mirando al cielo… rogándole al barba que todo eso fuera un sueño o, simplemente, una broma de pésimo gusto. Porque no cabía en la cabeza de ninguno la idea de que desapareciera la pasión. No podía borrarse una historia de amor tan grande como la de Racing. ¿Qué íbamos a hacer los domingos? ¿Quién nos iba a enamorar de la forma en que Racing lo hacía? ¿Quién nos iba a llenar el corazón de alegría e ilusión? ¿Qué iba a pasar con la vida de toda esa gente? Porque, al fin y a cabo, eso es Racing, es su gente… es el abuelo, el hijo y el nieto… son sus colores… es ese amor incondicional… es quedarse afónico todos los partidos… es ser feliz solo con verlo… es faltar un partido y sentir que le estás fallando… es contar las horas y los minutos para el tan ansiado reencuentro… es mirar a la camiseta con el amor más profundo que pueda existir… es inflar el pecho cada vez que decimos: “SEÑORES, YO SOY DE RACING”… es tu viejo y también es el mío.. sos vos y también soy yo… es su gente, esa que domingo a domingo demuestra que la frase “Lo mejor que tiene Racing es su gente” no es solo un mito, sino una descripción perfecta de la realidad...
Por esa gente, un tiempo después la balanza de la justicia se inclinó hacia el lado de la pasión… e hizo posible que Racing volviera a jugar… y con ello que cada corazón celeste y blanco volviera a latir nuevamente.

Agustin Melsa