La Filial informa (10-05-09)

Fotos de ayer en Velez-Racing

http://picasaweb.google.com/aiaoeoaaa/VelezRacing#

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Vélez iguala ante Racing y salva el invicto y la punta

BUENOS AIRES, Argentina- El puntero del Torneo Clausura, Vélez Sarsfield, levantó su producción en el complemento y logró empatarle en el Estadio José Amalfitani 2-2 al Racing Club en un electrizante partido para salvar su invicto en el campeonato.
Después de jugar un inteligente y ofensivo primer tiempo, Racing sintió el golpe en el descuento de Vélez y terminó en igualdad un cotejo que tuvo un final por demás emocionante.

El volante Claudio Yacob en el primer período y el delantero Rubén Ramírez, de penal en el complemento, anotaron los goles del conjunto de Ricardo Caruso Lombardi.

Por el lado de Vélez, que terminó con diez por expulsión del chileno Waldo Ponce, convirtieron Sebastián Domínguez y Víctor Zapata, el zurdo de tiro libre.

El local tomó la iniciativa y comenzó a llegarle a Racing con centros porque no podía entrar al área, debido a la prolija tarea de la defensa visitante.

Al equipo de Caruso le costó diez minutos tomar las marcas en el medio y poder salir del asedio velezano.

Tanto Brian Lluy, por derecha, y el tucumano Franco Sosa, por izquierda, fueron los baluartes más importantes de la ofensiva de Racing, ya que con sus constantes cambios de frente desarticularon a la última línea de Vélez.

De esta manera, no extrañó que las mejores chances para anotar las tuviera Racing. A los 24 minutos, Lluy envió un balón al área y Sosa apareció por sorpresa y sin marca para rematar de primera a las manos del bien ubicado arquero Germán Montoya. De a poco, Racing se hizo protagonista del encuentro y apagó las ilusiones de un Vélez sin ideas.

Finalmente, la justa apertura en el marcador la tuvo Racing a los 44. Sosa ejecutó un córner desde la izquierda y Yacob se anticipó a Montoya para poner el justo 1-0. En el segundo capítulo Vélez tuvo mayor juego con los ingresos de Juan Manuel Martínez y Leandro Velázquez, pero dejó espacios en su defensa.

Así Racing sacó provecho y en su primer avance aumentó, a los 6. Franco Razzotti le cometió un claro penal a Adrián Lucero y Ramírez anotó con un fuerte disparo al medio del arco.

A partir de entonces, Vélez se fue al ataque y Racing se paró de contra para definir el partido.

El descuento fue logrado por la insistencia de los de Liniers, a los 31, por un cabezazo de Domínguez, tras tiro libre de Jonathan Cristaldo.

Racing sintió el golpe y Vélez, sin tener claridad, jugaba cada vez más cerca de Pablo Migliore.

Iban 42 minutos cuando Zapata se hizo cargo de un tiro libre en la puerta del área y colocó la pelota en el ángulo superior izquierdo.

El final fue atrapante. Primero, lo tuvo Racing para ganar, a los 49, con un disparo de Lucas Castromán en el palo, y luego, en la contra, Velázquez elevó increíblemente su remate ante un arco vacío.

Síntesis:

Vélez: Germán Montoya; Fabián Cubero, Sebastián Domínguez, Nicolás Otamendi, Emiliano Papa; Gastón Díaz, Franco Razzotti, Víctor Zapata; Jonathan Cristaldo, Hernán Rodrigo López y Joaquín Larrivey.

Director técnico: Ricargo Gareca.

Racing: Pablo Migliore; Marcos Cáceres, Lucas Aveldaño, Matías Martínez, Franco Sosa; Brian Lluy, Franco Zuculini, Claudio Yacob, Adrián Lucero; Pablo Lugüercio y Rubén Ramírez.

Director técnico: Ricardo Caruso Lombardi.

Goles: En el primer tiempo: a los 44 minutos, Yacob (R). En el segundo tiempo: a los 6 minutos, Ramírez (R) de penal; a los 31, Domínguez (V); y a los 42, Zapata (V).

Cambios: en el segundo tiempo: en la reanudación del juego, Leandro Velázquez (V) por Larrivey; a los 11 minutos, Juan Manuel Martínez (V) por Díaz; a los 17, Waldo Ponce (V) por Razzotti; a los 24, Lucas Castromán (R) por Lugüercio; a los 36, Martín Wagner (R) por Lucero; a los 44, Pablo Caballero (R) por Ramírez.

Incidencia: en el segundo tiempo: a los 39 minutos, fue expulsado Ponce (V).

Estadio José Amalfitani (de Vélez).

Arbitro: Gabriel Brazenas.

http://msn.foxsports.com/fslasc/historia/futbol/argentina/primeradivision/9556078/Vélez-iguala-ante-Racing-y-salva-el-invicto-y-la-punta

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Salvó el invicto
Vélez caía 2-0 ante un Racing prolijo, y lo igualó sobre el final en un verdadero partidazo

Velez Sarsfield 2 - 2 Racing Club

BUENOS AIRES -- El puntero del Torneo Clausura, Vélez Sarsfield, levantó su producción en el complemento y logró empatarle en el Estadio José Amalfitani 2-2 al Racing Club un electrizante partido para salvar su invicto en el campeonato. Después de jugar un inteligente y ofensivo primer tiempo, Racing sintió el golpe en el descuento de Vélez y terminó en igualdad un cotejo que tuvo un final por demás emocionante.
El volante Claudio Yacob en el primer período y el delantero Rubén Ramírez, de penal en el complemento, anotaron los goles del conjunto de Ricardo Caruso Lombardi. Por el lado de Vélez, que terminó con diez por expulsión del chileno Waldo Ponce, convirtieron Sebastián Domínguez y Víctor Zapata, el zurdo de tiro libre.

El local tomó la iniciativa y comenzó a llegarle a Racing con centros porque no podía entrar al área, debido a la prolija tarea de la defensa visitante.

Al equipo de Caruso le costó diez minutos tomar las marcas en el medio y poder salir del asedio velezano.

Tanto Brian Lluy, por derecha, y el tucumano Franco Sosa, por izquierda, fueron los baluartes más importantes de la ofensiva de Racing, ya que con sus constantes cambios de frente desarticularon a la última línea de Vélez.

De esta manera, no extrañó que las mejores chances para anotar las tuviera Racing. A los 24 minutos, Lluy envió un balón al área y Sosa apareció por sorpresa y sin marca para rematar de primera a las manos del bien ubicado arquero Germán Montoya. De a poco, Racing se hizo protagonista del encuentro y apagó las ilusiones de un Vélez sin ideas.

Finalmente, la justa apertura en el marcador la tuvo Racing a los 44. Sosa ejecutó un córner desde la izquierda y Yacob se anticipó a Montoya para poner el justo 1-0. En el segundo capítulo Vélez tuvo mayor juego con los ingresos de Juan Manuel Martínez y Leandro Velázquez, pero dejó espacios en su defensa.

Así Racing sacó provecho y en su primer avance aumentó, a los 6. Franco Razzotti le cometió un claro penal a Adrián Lucero y Ramírez anotó con un fuerte disparo al medio del arco.

A partir de entonces, Vélez se fue al ataque y Racing se paró de contra para definir el partido.

El descuento fue logrado por la insistencia de los de Liniers, a los 31, por un cabezazo de Domínguez, tras tiro libre de Jonathan Cristaldo.

Racing sintió el golpe y Vélez, sin tener claridad, jugaba cada vez más cerca de Pablo Migliore.

Iban 42 minutos cuando Zapata se hizo cargo de un tiro libre en la puerta del área y colocó la pelota en el ángulo superior izquierdo.

El final fue atrapante. Primero, lo tuvo Racing para ganar, a los 49, con un disparo de Lucas Castromán en el palo, y luego, en la contra, Velázquez elevó increíblemente su remate ante un arco vacío.

http://espndeportes.espn.go.com/futbol/report?leagueCup=ARG.1&id=261245

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Vélez reaccionó a tiempo y salvó el invicto ante Racing

La Academia se puso en ventaja con goles de Yacob (PT 44m) y Ramírez (ST 6m), de penal, pero el Fortín lo empató con un cabezazo de Seba Domínguez (ST 31m) y un excelente tiro libre de Zapata (ST 42m). Los dos tuvieron chances para ganarlo sobre el final. El local terminó con diez por la expulsión de Ponce, quien había ingresado en el complemento.

En la previa se esperaba un partido emotivo en base a los protagonistas. Vélez, el líder y único invicto del torneo Clausura, frente al sorprendente Racing de Caruso Lombardi. Y no defraudaron. La visita se puso 2-0 en ventaja, pero el local empujó y equilibró la balanza. Sobre el final, los dos tuvieron oportunidades para ganarlo.

El conjunto de Liniers se puso el traje de protagonista en el arranque del encuentro. Salió a manejar la pelota y a presionar arriba, aunque se encontró con una Academia muy ordenada, bien parada con sus dos líneas de cuatro y rápida para salir de contra. Lluy cubrió cada subida de Papa y Lucero frenó por completo a Gastón Díaz.

Durante esos minutos, el Fortín no logró progresar y generar situaciones de riesgo. El más inquieto fue Cristaldo, pero sólo pudo ganar una vez por el sector izquierdo y su centro atrás terminó en un pésimo remate de Díaz. Con el correr de la primera parte, el equipo de Caruso empezó a presionar más arriba y complicó con la movilidad de Lugüercio y la velocidad del equipo en cada contra.

Yacob no lo dejó jugar a Zapata y las salidas de Vélez se hicieron cada vez más desprolijas. Además, Zuculini y Lluy comenzaron a proyectarse y la defensa local empezó a tambalear. A los 24, Sosa llegó por el segundo palo y conectó un terrible remate que le quemó las manos a Montoya, mientras que a los 32, Ramírez recibió en el punto del penal para anotar, se demoró y la perdió frente a la marca de Cubero.

Vélez siguió teniendo la pelota y llegando hasta tres cuartos de cancha, pero a partir de allí se quedó sin ideas, sin desborde, sin sorpresa, sin gambeta. Racing se agrandó aún más y a los 43 llegó con un tremendo cabezazo de Ramírez que Montoya envió al córner. Sosa se hizo cargo del tiro de esquina y la puso al primer palo para el frentazo de Yacob, quien puso el 1-0.
El segundo periodo fue realmente emotivo. Vélez volvió a hacerse de la pelota en el comienzo, pero la Academia lo agarró de contra a los seis minutos y Cubero le cometió un ingenuo penal a Lucero. Migliore lo pidió, pero Ramírez se hizo cargo y facturó al medio del arco para el 2-0. Parecía definitivo por la firmeza del conjunto de Avellaneda, pero el Fortín sacó chapa.

El equipo de Gareca, ya con Velázquez en cancha, se fue con todo al ataque, aunque siguió chocando contra la férrea defensa visitante. Es más, Castromán lo tuvo de contra a los 30, pero su disparo fue controlado de buena manera por Montoya. Un minuto después, Brazenas cobró una dudosa falta sobre la derecha y Vélez la aprovechó. Seba Domínguez ganó de cabeza y descontó.

El gol fue un baldazo de agua congelada para Racing, que se metió aún más atrás y le entregó todo el terreno al dueño de casa. La expulsión del ingresado Ponce a los 39 pasó casi inadvertida, ya que el Fortín siguió apretando con poco fútbol, pero con mucha actitud.

Y de tanto ir llegó al empate. Zapata ejecutó un tiro libre y la clavó en el ángulo izquierdo de Migliore. Sobre el final lo tuvieron los dos. Castromán encaró, la punteó por debajo de Montoya y el balón dio en el palo. Y a los 50, Velázquez, tras una contra, lo erró de zurda con el arco libre. Regalaron innumerables emociones. Fue 2-2.

http://www.tycsports.com/global/not_detail.php?id=49338

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CORAZON VALIENTE
Las sensaciones que sólo el fútbol es capaz de generar

Sale el remate de tiro libre del "chapa" Zapata. Fue el milagroso 2 a 2 de Velez.

PABLO VIGNOLA
El corazón nunca da trompadas tan fuertes como las que le provoca el fútbol. El José Amalfitani fue testigo de una de esas exposiciones fantásticas que es capaz de ofrecer este juego maravilloso.
Dos equipos, dos realidades, dos necesidades, pero el mismo objetivo. Vélez y Racing, inicialmente, saltaron a la cancha obligados a ganar. Vélez, porque en su carrera invicta detrás de la gloria, pisaba el césped de casa con toda la presión de un líder. Racing, urgido por sumar puntos que lo alejen de la zona crítica, le hacía frente a la batalla más dura de su heroica reacción.
Y tan fabuloso es fútbol que, el abanico de sensaciones que entregó la tarde-noche, hubo emociones para todos los gustos. Racing infló el pecho, no tuvo miedo, maniató a Vélez y, además de controlarlo, le pegó dos directos al mentón que sacudieron la carta astral del torneo. Porque el equipo de Caruso, en la inercia de su paso firme para escapar al fondo lograba asomar la cabeza en la superficie donde se juega por otra cosa. Casi sin darse cuenta, se puso a cinco puntos del líder y se perfilaba para declarar la guerra.
El pueblo de Racing vibraba de emoción. El de Vélez, con un nudo en la garganta, veía aparecer los fantasmas que suelen ahuyentar la ilusión. Pero había más, porque los de Gareca también tenían crédito en su cuenta espiritual y a ella apelaron cunado más lo necesitaban.
El chileno Ponce entró con las revoluciones aceleradas y dejó a Vélez con diez un rato después de que Sebastián Domínguez descontara de cabeza. Con lo que el la recta final del juego -cinco minutos netos y cinco de descuento- se impregnó de nuevas sensaciones.
La angustia se mudó de tribuna, lo mismo que el entusiasmo. Vélez mostró las garras y la personalidad indispensables en el curriculum de cualquier aspirante a campeón y tuvo su premio con un tiro libre impecable de Zapata que se clavó en un ángulo.
Si algo faltaba, en el tiempo extra, hubo lugar para que los corazones volvieran a palpitar en el contraste que oscila entre la vida y la muerte, de un lado y del otro. Castromán pegó lo que hubiera sido victoria de Racing en el palo y, en la réplica, Velázquez tiró por arriba del travesaño lo que pudo ser triunfo de Vélez. Latidos que sólo el fútbol genera, los latidos de corazones valientes.

VELEZ 2 - RACING 2

Con un Zapatazo, Vélez logró un empate impensado

HUGO IÑIGUEZ
La frustración terminó siendo un denominador común para Vélez y Racing, que se despacharon con un partido de esos que no se olvidan, que dejan material para toda la semana, despertando polémicas interminables. Uno salvó su invicto “y punto”, el otro se quedó con ganas de sumar de a tres. El Fortín no estuvo a la altura de sus antecedentes ni jugó “a lo puntero” ante una Academia que lo tenía envuelto como para un regalo, pero como no le puso el moño se le escapó por “nada”. Los lamentos estuvieron a la orden del día, con Vélez insistiendo, chocando contra una pared (“no pudimos” y “no nos dejaron jugar”, se oyó) y enfrente, hicieron foco en el árbitro (“si nos daba el penal por mano de Cubero cuando estábamos 2-0...”). Pero hubo más: en las dos últimas jugadas, en ese ida y vuelta que se generó en el epílogo, lo pudo ganar cualquiera, incluyendo un disparo de Castromán al palo izquierdo de Montoya y el remate alto de Velázquez con Migliore desparramado y fuera de foco, sin poder salir en la foto, con el arco libre. Fue imperdible, infartante, inolvidable, todo junto en un cóctel cargado de dramatismo, que le pasó por encima a un pobre desarrollo desde lo técnico.
Racing se plantó con inteligencia y una vez que se afirmó en defensa, neutralizó cualquier inquietud ofensiva de Vélez. Una actitud se vislumbró muy pronto, que a la Academia no le molestaba que los intentos de su rival partieran de los pies Razzotti, pero se hizo celoso para controlar las subidas de Papa y Zapata por izquierda o de Cubero y Díaz por derecha. El sacrificio se hizo bandera si de Zuculini y Yacob se trataba. Entre ambos mordieron, corrieron, apretaron, mostraron las uñas y un espíritu combativo envidiable. No hay que dejar de mencionar a la viveza de Lugüercio para encontrar huecos y un Ramírez que entró poco en escena pero cuando lo hizo se mostró a pleno.
Vélez comenzó a hacerse repetido, monótono, sin cambio de velocidad, con un tridente ofensivo al que se lo asistió poco y mal. Es más, Larrivey y Rodrigo López se llegaron a chocar, atolondrados, yendo a la misma velocidad por el carril más congestionado a la hora pico. Así, exponiendo sus falencias con palpable vulnerabilidad, Vélez resultó pura impotencia y fue rebotando y chocando contra un muro.
Desdibujado, sin línea ni rumbo, no extrañó que Racing se adueñara del trámite. Antes del cierre de la primera etapa, un córner de Sosa fue volando a la cabeza de Yacob y Montoya hizo el resto: 1-0 y al descanso. Cuando regresaron, poco se modificó, porque Racing se acomodó para cuidar la ventaja y de yapa, aumentó gracias a un penal increíble regalado por Razzotti (manoteó a Lucero). Ramírez eligió el medio y como el arquero se volcó a la izquierda, el 2-0 era una realidad.

APARECIO VELEZ

Nada hacía presagiar una reacción de Vélez, pero... La Academia se lamentó por no poder cerrarlo (penal no cobrado por mano de Cubero; Castromán fue a fondo y perdió con Montoya) y lo pagaría extremadamente caro. De repente llegó el descuento (cabezazo de Sebastián Domínguez tras tiro libre de Velázquez) y ahí, en el revuelo y ya con diez por la tonta roja que se ganó Ponce, empujando más que jugando, los de Gareca pusieron todas las fichas a un pleno. De frente al arco, Zapata la clavó en un ángulo con un tiro libre perfecto que dejó estático a Migliore, con un estadio transformado en caldera.Los momentos finales fueron de antología, con un ida y vuelta que le hizo bien al juego, aunque lejos de la riqueza técnica. Castromán apiló por derecha y remató al poste, en el cuarto minuto adicionado. En la siguiente, López lo dejó solo a Velázquez, con Migliore despatarrado y el arco abierto al gol. Pero no. Apasionante, a pura tensión, como para que de uno y otro lado se arrogaran derecho a cantar victoria. Pudo ser para cualquiera, Racing imaginaba otro epílogo, la obra no pudo ser completa. Ya sabemos que en algunas películas no siempre ganan los “buenos”.

CARUSO LOMBARDI

“Fue el partido perfecto, salvo por el resultado”

Caruso le da una indicación a Ruben Ramirez, quien se acercó al banco.

MARIANO BOURGAREL
El final del partido, dejó una sensación encontrada en el estado de ánimo de Ricardo Caruso Lombardi. Porque de un lado, se ubicó la satisfacción por la actuación del equipo, que superó futbolísticamente al puntero del campeonato; y en la vereda de enfrente, quedó la bronca por los dos puntos que se escaparon en el final, cuando parecía que el conjunto de Avellaneda se iba a llevar el triunfo. “Fue el partido perfecto, salvo por el resultado” sentenció el entrenador, como síntoma de resignación.
Caruso también se unió a la ola de críticas hacia la labor de la terna arbitral: “cuando terminó el encuentro, fui a hablar con Rocchio (Francisco), el asistente, y le dije que no hubo falta en la acción que derivó en el primer gol de Vélez. No sé qué cobró, pero lo vi clarito, no pasó nada”. Aunque bajó un cambio y especificó que “ahí sólo cobraron un tiro libre, después, no fueron con Brazenas a cabecear, el gol lo marcó un jugador de Vélez, aprovechando la acción de pelota parada”.
Para el entrenador de Racing, “ese gol lo hizo despertar a Vélez. Porque estamos muerto. No había hecho nada para descontar. Y al ponerse dos a uno, se animó y fue a buscar con otra vocación. Porque Racing había sido más todo el partido y contó con situaciones como para liquidar antes el juego”.
Caruso también contó que “los jugadores me dicen que en el tiro libre del empate, la barrera estaba a más de diez metros. No sé. Igual, si Zapata le pega así y la clava del ángulo, no importa si hay diez o veinte metros de distancia con la barrera”.
Lo que no le perdonó a Brazenas es “la clara mano de Cubero, dentro del área, cuando estábamos dos a cero. Fue un penalazo. Y el juez sabe que eso era para cobrar. Era el tres a cero y chau partido. Se terminaba todo. Nos llevábamos los tres puntos, que tanto necesitamos para salir de la situación delicada en la que estamos”.
Volviendo al rendimiento del equipo, Caruso insistió con que “hicimos un partido perfecto, salvo por el resultado final. Pero estas cosas pasan en el fútbol. El destino a veces quiere que no te quedes con lo que merecés. Lo importante es que seguimos sumando y que fuimos superiores al puntero del campeonato. Si ellos no perdieron esta vez, no sé cuándo van a perder el invicto”.

http://www.popularonline.com.ar/nota.php?Nota=382238&fechaEdicion=2009-05-10%2000:00:00